La pérdida de la audición relacionada con la edad es un proceso natural, pero puede afectar significativamente la calidad de vida. Por ello, es crucial buscar ayuda profesional.
Es posible que la pérdida de audición se manifieste de manera gradual, de modo que no nos demos cuenta del cambio. Quizás se encuentre en situaciones donde piense: «¿Por qué hay tanto ruido en este restaurante?», o «Debe de estar estropeado el televisor, no puedo escuchar nada, incluso subiendo el volumen».
Sin embargo, es importante considerar que quizás no sea el entorno, sino su capacidad auditiva la que esté cambiando. Un síntoma común es la sensación de que las personas a su alrededor han decidido susurrar de repente. Sus familiares podrían estar cansados de repetir las cosas una y otra vez. La negación es común, con frases como: «Yo oigo perfectamente, son los demás los que hablan de forma confusa».
La pérdida de audición relacionada con la edad, también conocida como presbiacusia, es sorprendentemente común, afectando alrededor del 13% de los adultos mayores de 50 años y a más de la mitad de los mayores de 70 años. Aunque no se puede prevenir por completo, existen formas de proteger y preservar su audición desde ahora.
Es crucial estar atento a los síntomas. Investigaciones revelan que las personas esperan en promedio alrededor de 10 años antes de buscar ayuda para sus problemas auditivos. Sin embargo, la pérdida de audición se ha relacionado con condiciones como demencia, depresión y riesgo de caídas, por lo que es fundamental reconocer las señales tempranas.
Si experimenta dificultades para escuchar conversaciones en entornos ruidosos o problemas para entender lo que se dice en medio de una multitud, podría ser momento de hacerse una prueba auditiva con un audiólogo.
Además, es esencial controlar sus niveles de exposición al ruido. La exposición prolongada a ruidos por encima de los 70 decibelios puede dañar su audición. Es importante establecer límites de volumen seguro, tanto en dispositivos como en entornos ruidosos.
Utilizar equipo de protección, como tapones para los oídos, al operar herramientas eléctricas o al cortar el césped, es una medida preventiva importante.
En cuanto a los auxiliares auditivos, han avanzado significativamente en la última década, ofreciendo tecnología más discreta y conectividad Bluetooth. No solo pueden mejorar su calidad de vida, sino que también se ha demostrado que pueden ralentizar el deterioro cognitivo, promoviendo la salud cerebral.
No subestime la importancia de cuidar su audición. Preste atención a las señales y busque ayuda profesional si experimenta algún síntoma de pérdida auditiva. Su calidad de vida puede mejorar significativamente con medidas simples pero efectivas.
